En la asistencia sanitaria, debido a la innovación, la complejidad y los cambios demográficos, los recursos financieros son limitados y deben asignarse de forma eficiente (Frejier, K. et al., 2015). Así, la rendición de cuentas sobre la efectividad de la atención nutricional es fundamental para el futuro de la salud y de la práctica dietético-nutricional (Frejier, K. et al, 2015; BDA, 2011).

El asesoramiento dietético-nutricional debe seguir un modelo “paso a paso” con un proceso claro, que conduzca a resultados medibles (Vanherle, K. et al, 2018).

La gestión de los resultados es un proceso amplio que incluye la documentación (registro) y el análisis de resultados. El análisis sirve para la interpretación, comparación y validación de la intervención dietético-nutricional.

Además de medir los resultados de salud, también es relevante prestar atención a qué es lo que puede ser importante para el paciente. Para optimizar la atención centrada en el paciente, mejorar la comunicación paciente-personal sanitario, empoderar a los pacientes y mejorar la calidad de la atención, la medida de resultados de salud deben complementarse con los resultados notificados por el pacientes o PROM (Patient Reported Outcome Measures) (Almario, C. et al., 2016; Biber, J. et al., 2017; Chui, T.K. et al., 2019; Devlin, N. et al., 2010; Foster, A. et al, 2017; Greenhalgh, J. et al., 2018; Mejdahl et al., 2017, BDA 2011).